Gallo Nero publica este manga ‘gekiga’ inspirado en dos relatos de Ango Sakaguchi
Una mujer y la guerra es una obra escrita originalmente por Ango Sakaguchi, un reconocido autor japonés. Publicada por primera vez en 1946, se trata de un díptico de cuentos sobre la vida en Japón durante la II Guerra Mundial. Sakaguchi fue un autor crítico y provocador, que cuestionó el nacionalismo y el militarismo de su país, y que defendió la libertad individual y el hedonismo. Su obra fue censurada por las autoridades por ser «inadecuada», pero aún así, Una mujer y la guerra ha sido elogiada por su profundidad emocional y su poderoso retrato de la realidad de la guerra desde la perspectiva de una mujer. A través de la historia de Yasuko, Sakaguchi ofrece una mirada conmovedora y reflexiva sobre los efectos destructivos de la guerra en la vida de las personas y en la sociedad en su conjunto.
La novela fue publicada en español por Satori en 2022, y ahora Gallo Nero ha publicado la adaptación que Yoko Kondo hizo de ella en 2012. Gallo Nero se ha especializado en publicar en español una selección de los mejores gekiga, pero en esta ocasión nos encontramos con un caso diferente y curioso: se trata de un manga contemporáneo, no de primera generación (la obra original sí fue creada plenamente en la era gekiga), y es el primero que Gallo Nero que publica de una mujer.
Yoko Kondo tenía una tarea complicada ante ella: quería unir los dos relatos de Una mujer y la guerra, entrelazarlos y adaptarlos como una sola obra. Cada relato ofrecía dos perspectivas distintas sobre la vida bajo las bombas: una masculina y otra femenina. En la historia, una mujer ex prostituta e incapaz de sentir placer llega a un acuerdo con un hombre para aparentar que son pareja mientras dure la guerra. No es el amor lo que los une, sino el caos que los rodea. En medio de los bombardeos nocturnos, la mujer oscila entre un intenso deseo de vivir y el miedo a morir en un Japón que llega a su fin: «El gran fuego que devora el mundo y todo lo reduce a cenizas es lo único que me satisface».
“Deseo de corazón que llegue el día en que la ciudad quede envuelta en llamas”, exclama la protagonista
Sexo y muerte. Una mujer y la guerra es como el reverso oscuro de aquella obra maestra del cine que es In the mood for love de Wong-Kar Wai, donde un hombre y una mujer viven una relación imposible forzada por la infidelidad de sus respectivas parejas. Aquí, los protagonistas son conscientes del leve vínculo que les une. En esa hipócrita situación que viven, él la rechaza por haber estado con muchos hombres y ser incapaz de amar: sabe que cuando acabe la guerra y encuentre a alguien “mejor” la repudiará, pero no tiene objeción en tener relaciones sexuales con ella a conveniencia. Por su parte, ella sabe que está siendo utilizada, pero, incapaz de sentir emociones, el sexo y la destrucción de su país son las dos únicas cosas que la hacen sentir viva.
Yoko Kondo, una autora cercana al círculo de la revista Garo, consigue trazar un puente de unión entre el estilo feísta y descarnado de los primeros autores costumbristas (Tsuge, Tatsumi) y el manga actual con una línea clara y definida, pero también austera, como lo solicita la historia. A esto creo que hay que añadir su particularidad sensibilidad femenina. Las escenas de sexo, por ejemplo, están tratadas con una delicadeza magnífica y, sin resultar sórdidas, se adaptan bien a las sensaciones de la protagonista.
Una mujer y la guerra ofrece una extraordinaria adaptación por parte de Yoko Kondo de los relatos de Sakaguchi. Kondo ha sabido darles una nueva impronta y ha recreado en dibujos a la perfección esa sensación de confusión, de deriva, que caracteriza al gekiga y a esos personajes que en un momento histórico que vivían, se sentían profundamente perdidos. Esto es neorrealismo japonés del bueno. Concluyendo: una de las mejores incorporaciones a esta colección no oficial de gekiga de Gallo Nero que os aconsejamos leer.
¿Qué es el gekiga?
El género gekiga es un género del manga que aborda historias más costumbristas y habitualmente con un tono más melancólico, triste o pesimista: la versión nipona del tremendismo realista. El término gekiga significa “imagen dramática” y fue acuñado por el mangaka Yoshihiro Tatsumi en 1957, para diferenciar su obra de la de Osamu Tezuka, considerado el padre del manga moderno. El gekiga surgió como una forma de expresión artística y social de los mangakas que vivieron la Segunda Guerra Mundial y sus consecuencias, y que querían mostrar una visión crítica y nihilista de la sociedad japonesa. Algunos de los representantes más destacados del género gekiga son Shigeru Mizuki, Yoshiharu Tsuge, Tako Saito y el propio Yoshihiro Tatsumi. El gekiga influyó en el desarrollo del manga alternativo y experimental, y abrió las puertas a una mayor diversidad de estilos y temáticas en el mercado comercial del manga.
Especial manga gekiga en Papel en Blanco:
- ‘La mujer de al lado’: historias de los derrotados
- ‘La chica de los cigarrillos’: costumbrismo y gekiga de Masahiko Matsumoto
- ‘Los sentimientos de Miyoko en Asagaya’, de Shin’ichi Abe
- ‘Nejishiki’: los sueños húmedos de Yoshiharu Tsuge
- ‘Tatsumi’: culpables y perdedores
En la desolación: ‘Una mujer y la guerra’, de Yoko Kondo was originally published in Papel en Blanco on Medium, where people are continuing the conversation by highlighting and responding to this story.