Jamie Grey trabaja en una start up de repartos de comida, una especie de Uber Eats, en un cargo ejecutivo, cuando de pronto llega la pandemia y se ve despedido y obligado a trabajar en la misma empresa, pero como repartidor, en unas condiciones miserables, porque todo ha cerrado y no encuentra otro trabajo. Ya desde el inicio Scalzi nos demuestra las que suelen ser sus mayores virtudes. Personajes simpáticos y cercanos, buenos diálogos, un sentido del ritmo impecable y la agradable sensación de que no dejan de pasar cosas. Todo aderezado con numerosas referencias a la cultura popular. La deuda de Scalzi con Robert A. Heinlein se hace sentir incluso cuando los temas de esta novela se alejan de los típicos que tocaba aquel.

No sorprenderá a nadie que nuestro protagonista sea reclutado por la sociedad que da nombre a la novela y tenga la oportunidad de conocer a los kaiju en su hábitat natural. Sin querer revelar nada, todo lo que concierne a la biología y ecosistema de los kaiju es lo mejor de la novela, consiguiendo, como suele conseguirlo Scalzi, estar siempre a caballo entre la ciencia ficción más dura y el pulp más desvergonzado. Pronto conocerá a un simpático elenco de científicos. Como suele pasar con los personajes del autor (y con los de Heinlein), enseguida sientes que tú también podrías ser amigo suyo. Son divertidos e ingeniosos y amenizan una trama bastante predecible, dónde los kaiju sirven en cierto modo de metáfora de la pandemia, y se critica la mal llamada economía colaborativa, que al final ha resultado ser otra forma de que los millonarios empeoren las condiciones laborales de sus empleados. En todo ello cuesta no sentir que estás de acuerdo con el autor, pero eso es porque no ha arriesgado ni nos ha contado nada que no sepamos.

En la nota del autor al final de este libro, Scalzi nos cuenta que se le atascó una novela que tenía que entregar a la editorial. Sin saber cómo terminarla y viendo que no funcionaba, comunicó a la editorial que abandonaba el proyecto. La novela ya estaba anunciada y tenía un hueco asignado en el calendario de la editorial y él siempre había sido considerado uno de esos escritores fiables que siempre entregan a tiempo. Así que para sacarse la espina, escribió en su lugar esta novela, en solo dos meses, y así cumplió con el contrato y entregó a tiempo. Se agradece la sinceridad y la historia me parece muy interesante, pero lo cierto es que se nota que la escribió en dos meses. Y con eso no quiero decir que sea una mala novela. Es divertida y ligerita, porque no pretende otra cosa. También es cierto que es la peor novela que he leído de este autor. Que su peor obra sea bastante decente, en realidad, habla bastante bien de John Scalzi. Pero si no habéis leído nada suyo, no lo juzguéis por esta novela.

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‘La sociedad por la preservación de los kaiju’, de John Scalzi: una ligera fantasía pop was originally published in Papel en Blanco on Medium, where people are continuing the conversation by highlighting and responding to this story.