Visit Sponsor

Written by 8:12 am Uncategorized

‘El señor de las moscas’, de William Golding

El clásico, con ilustraciones de Jorge González

El señor de las moscas

Es imperdonable para un lector como yo que no hubiera leído hasta ahora El señor de las moscas, la novela de William Golding. Un clásico de la literatura que es lectura preceptiva en los institutos del mundo anglosajón. ¿Qué hizo que no leyera esta novela? Pues simplemente los avatares del destino, que durante nuestra vida nos llevan a unas lecturas y a otras no. Y sin embargo, Libros del Zorro Rojo me brindaba una nueva oportunidad con su nueva edición del libro, con ilustraciones de Jorge González.

Seguramente conoceréis el argumento de la novela, puesto que ha sido adaptada al cine dos veces (que yo sepa) y hay un conocido episodio de Los Simpson que es una parodia de la obra. En El señor de las moscas, un grupo de niños tiene un accidente de avión y tienen que sobrevivir, sin la presencia de ningún adulto, en una isla desierta. Las desavenencias entre ellos en seguida convertirán lo que sería una fantasía adolescente en una pesadilla.

William Golding, que había servido en la Segunda Guerra Mundial, ofrece una visión autenticamente pesimista de la naturaleza humana. El autor pone del revés la obra clásica en la que se basa, La isla de coral de Robert Michael Ballantyne (1857). En dicha novela, tres muchachos ingleses supervivientes de un naufragio, se ven obligados a colaborar y convivir en una isla polinesia, donde traban amistad y llevan una vida apacible. En El señor de las moscas es todo lo contrario: el escepticismo hobbesiano de Golding se enfrenta de forma radical con el tópico del buen salvaje, como veréis más adelante, en el párrafo destinado a los que ya conocen la novela o no les importa que les pise el argumento. La pérdida de la inocencia, la naturaleza brutal del hombre o el miedo como motor de nuestros actos son los principales temas de la obra. Golding dosifica bien la tensión narrativa de la novela. A medida que ésta avanza, la intriga va en aumento hasta un punto en que los ultimos capítulos son tan absorbentes que su lectura no puede abandonarse.

Interpretaciones y comentarios sobre el argumento (contiene espóilers)

Tradicionalmente se han hecho diversas lecturas alegóricas de la obra: en la más común, Ralph es el chico que representa los valores democráticos y el establecimiento del orden. Por contra, Jack es el chico que opta por renegar del orden y volverse él y los suyos en “salvajes”, cuya única preocupación es cazar. Se podría ir más allá en la alegoría, y sugerir que el conflicto que viven los chicos es un espejo de la Segunda Guerra Mundial: Ralph podría ser las fuerzas de la democracia; Jack, el nazismo que arrasa el territorio. Siguiendo esa metáfora, podríamos encontrar una representación para Simon (el primero que se da cuenta de que el viraje de Jack está llevando a la perdición a los chicos), los mellizos Sam y Eric (los colaboracionistas a su pesar), o incluso los oficiales del final del libro podrían ser las fuerzas “exteriores” (EEUU) que entraron en juego para “salvar” la situación.

Sea como sea, Golding enfrenta dos filosofías: una que intenta establecer un orden artificial en la naturaleza, y otro que se entrega a ésta de forma total. Los resultados son catastróficos: la naturaleza no sabe de estructuras sociales o de conceptos como piedad o solidaridad. En la naturaleza prevalece la ley del más fuerte y el hombre, en el fondo, es un animal. Incluso el sentido común es barrido por este caos primordial: una de las cosas que lamenta Ralph es el poco sentido común que tiene la “tribu” de Jack, a los que sólo preocupa cazar y celebrar, y no ser rescatados.

El miedo es otro de los factores clave del libro: al principio es sólo un rumor entre los chicos; luego, la “fiera” de la isla será uno de los principales factores por lo que pasa lo que pasa en la isla. La cabeza de jabalí que le ofrecen a la fiera, ese “señor de las moscas” del título que le habla a Simon, es la personificación del miedo y la locura que se abate sobre el grupo de supervivientes.

Al final, cuando ya parece que no hay escapatoria para Ralph, la pesadilla termina con la llegada de adultos a la isla. Me llamó la atención como éstos reprenden a los chicos por sus “juegos”, y en ese momento, toda la carga trágica de la obra salta por los aires. Es como si, con la irrupción de los mayores, todo lo que ellos han vivido quedase relativizado, minimizado a unas chiquilladas, cuando en realidad ha sido toda una sociedad la que ha caído. Uno piensa, ¿qué ocurrió después? ¿Cómo se miraban a la cara los miembros de la tribu de Jack y Ralph en el barco de vuelta a casa?

El señor de las moscas

Conclusiones (para todos)

La edición de Libros del Zorro Rojo tiene el interés añadido de las ilustraciones de Jorge González. Este artista, aparte de ser un excelente ilustrador, es también un excelente autor de cómics como lo prueban la versión de ‘La Odisea’ que hizo para SM en 2008 o ‘Fueye’, que fue I Premio Internacional Novela Gráfica FNAC-Sins entido.

He disfrutado enormemente de una lectura como la de El señor de las moscas. Es una magnífica reflexión sobre la condición humana y un relato iniciático que habla sobre cómo nos convertimos en adultos y qué es lo que nos mueve. Ojalá hubiera podido leerla de adolescente; seguro que, de esa forma, su impacto en mí hubiera sido aún más profundo. Pero aún estoy a tiempo: creo que algún año de estos la propondré como lectura en Secundaria.

El señor de las moscas
William Golding
Traducción de Carmen Vergara
Ilustraciones de Jorge González
Epílogo de Ian McEwan
Libros del Zorro Rojo, 2023.

También te puede interesar:

‘Papá piernas largas’, el clásico juvenil de Jean Webster


‘El señor de las moscas’, de William Golding was originally published in Papel en Blanco on Medium, where people are continuing the conversation by highlighting and responding to this story.

(Visited 7 times, 1 visits today)
[mc4wp_form id="5878"]
Close